Cuando hablaba por ultima vez sobre mis aventuras y desventuras con las portadas que diseño, (mas bien perpetro) para mis libros autopublicados, no me había aun atrevido con subir la portada final a Lulu.com, y vérmelas con su diseñador de portadas. Que va bien, no digo que no. Pero que a poco que intentes hacer algo complejo, va como el c…
Pues bien, como decía en el anterior post, había seleccionado 6 iconos para representar a las temáticas de los cuentos contenidos en Historias de Cuento Ficción, pero gracias al susodicho diseñador de portadas, uno de los 6 iconos tenia que morir, ya que quisiera o no un código de barras iba a ocupar la esquina inferior derecha de la contraportada. Si quería mantener la simetría, uno de los iconos tenia que irse para no volver.
La portada original:
Y en esta ocasión, el héroe imbatido, el incansable luchador, y salvaje guerrero, cayó por culpa de un simple código de barras auto generado.
Bye, bye, bárbaro:
Y si, ya sé que tendría que haber perseverado y subir la portada en pdf directamente a lulu, dejándome de la mandanga del diseñador de portadas, pero no me atreví y el tiempo limite para recibir el pedido se me venia encima, vamos, el pan nuestro de cada día de la autopublicación.
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